Repta y huye hacia la luz, lector, no hay otra salida.


En busca de la templanza perdida





Busca un paisaje que le transmita si no quietud al menos templanza. Un aire benigno, una luz suave, tonos de voz bajos. No es mucho pedir de la circunstancia por parte del Yo. Esa aspiración sería más efectiva que los sueños, las ilusiones y las fantasías. Sin embargo, mientras persigue signos de moderación por el bien de su cuerpo, practica con abundancia estas alternativas en las que él es maestro. Eterno combate entre los límites y la necesidad de sobrevivir cada día.